Estrategia de Dios por excelencia: las señales
Las señales:
+ Ejercitan nuestra fe.
+ Ponen a prueba nuestra obediencia.
+ No son para
+ El hombre de las señales: Gedeón
Jueces 6: 14 -21
“Mirándolo Jehová, le dijo: --Ve con esta tu fuerza y salvarás a Israel de manos de los madianitas. ¿No te envío yo? 15 Gedeón le respondió de nuevo: --Ah, señor mío, ¿con qué salvaré yo a Israel? He aquí que mi familia es pobre en Manasés, y yo soy el menor en la casa de mi padre. 16 Jehová le dijo: --Ciertamente yo estaré contigo, y tú derrotarás a los madianitas como a un solo hombre. 17 Él respondió: --Yo te ruego que si he hallado gracia delante de ti, me des señalo de que has hablado conmigo. 18 Te ruego que no te vayas de aquí hasta que vuelva a ti y saque mi ofrenda y la ponga delante de ti. Jehová le contestó: --Yo esperaré hasta que vuelvas. 19 Gedeón se fue, preparó un cabrito y panes sin levadura de un efa de harina, puso la carne en un canastillo y el caldo en una olla y, sacándolo se lo presentó debajo de aquella encina. 20 Entonces el ángel de Dios le dijo: --Toma la carne y los panes sin levadura, ponlos sobre esta peña y vierte el caldo. Él lo hizo así. 21 Extendiendo el ángel de Jehová el cayado que tenía en su mano, tocó con la punta la carne y los panes sin levadura, y subió fuego de la peña, el cual consumió la carne y los panes sin levadura. Luego el ángel de Jehová desapareció de su vista”.
Luego de esta señal Gedeón hizo el sacrificio que Dios le pidió y derribó los altares de Baal y Asera. Para luego convocar a los israelitas para la batalla.
Jueces 6: 36 - 40
“36 Gedeón dijo a Dios: «Si has de salvar a Israel por mi mano, como has dicho, 37 he aquí que yo pondré un vellón de lana en la era; si el rocío está sobre el vellón solamente, y queda seca toda la otra tierra, entonces entenderé que salvarás a Israel por mi mano, como lo has dicho». 38 Y así aconteció, pues cuando se levantó de mañana, exprimió el vellón para sacarle el rocío, y llenó con él un tazón de agua. 39 Pero Gedeón dijo a Dios: «No se encienda tu ira contra mí si hablo de nuevo: probaré ahora otra vez con el vellón. Te ruego que solamente el vellón quede seco, y el rocío caiga sobre la tierra. 40 Aquella noche lo hizo Dios así; solo el vellón quedó seco, y en toda la tierra hubo rocío”.
Luego de esta señal Gedeón hizo lo que Dios le mandó de apartar de su ejército multitud de hombres hasta quedar con solamente 300.
Jueces 7: 9-15
9 Aconteció que aquella noche Jehová le dijo: «Levántate y desciende al campamento, porque yo lo he entregado en tus manos. 10 Si tienes temor de descender, baja al campamento con tu criado Fura, 11 y oirás lo que hablan. Entonces te animarás y descenderás a atacarlos». Gedeón descendió con su criado Fura hasta los puestos avanzados de la gente armada que estaba en el campamento. 12 Los madianitas, los amalecitas y los hijos del oriente se habían esparcido por el valle como una plaga de langostas, y sus camellos eran innumerables como la arena que se acumula a la orilla del mar. 13 En el momento en que llegó Gedeón, un hombre contaba un sueño a su compañero, diciendo: --He tenido un sueño: Veía un pan de cebada que rodaba hasta el campamento de Madián. Llegó a la tienda y la golpeó de tal manera que cayó; la trastornó de arriba abajo y la tienda cayó. 14 Su compañero respondió: --Esto no representa otra cosa sino la espada de Gedeón hijo de Joás, varón de Israel. Dios ha entregado en sus manos a los madianitas con todo el campamento. 15 Cuando Gedeón oyó el relato del sueño y su interpretación, adoró. Después volvió al campamento de Israel y dijo: «Levantaos, porque Jehová ha entregado el campamento de Madián en vuestras manos”.
La gran diferencia entre los que piden señal para dirección y lo que piden señal por incredulidad.
Mateo 4: 5-7
“Entonces el diablo lo llevó a la santa ciudad, lo puso sobre el pináculo del Templo 6 y le dijo: --Si eres Hijo de Dios, tírate abajo, pues escrito está: “A sus ángeles mandará acerca de ti”, y “En sus manos te sostendrán, para que no tropieces con tu pie en piedra”.7 Jesús le dijo: --Escrito está también: “No tentarás al Señor tu Dios”.